Bueno

sábado, 11 de agosto de 2018

Mi experiencia con la sábila

En este artículo ofrezco mi experiencia con la sábila.

La sábila, es una de las plantas curativas y preventivas más bondadosas que nos ha dado la madre naturaleza, conocida también como aloe vera y hasta la fecha todavía no se termina de descubrir todas sus propiedades, pero de que es buena, es buena. Se puede usar para algún problema muy puntual o como parte de la dieta diaria como medida preventiva.

Yo por eso, desde que me dí cuenta de que la sábila tiene propiedades medicinales me comenzó a interesar, pero tengo que admitir que no lo consumía, aunque tenía una que otra planta en casa.

Sábila
Me comencé a interesar cuando en las juguerías se puso de moda el "jugo verde" y también por la abundancia de productos industrializados que los vendían como "Aloe Vera" o con algún nombre parercido, sobre todo las empresas de multinivel que le llaman incluso "marketing multinivel"

Tanto el jugo verde como los productos que contienen sábila, pero realmente solo contienen una porción de la sábila, porque lo demás está compuesto por agua, endulzantes, saborizantes y hasta colorantes.

Me dí cuenta de que uno no obtiene la cantidad de aloe por el que está pagando, fue cuando algunos amigos me dijeron -Pues préparatelo tú- incluso me dieron la receta, para preparar este jugo.

Lo hice unas pocas veces porque me parecía muy complicado, si alguién ya lo ha hecho sabrán de lo que estoy hablando.

Se tiene que ir a cortar la penca de la sábila, pelarlo, sacarle la pulpa, cortar el limón (o cualquier ingrediente que se le ponga), ponerle agua, licuarlo, colarlo y tomarlo.

Y después viene la parte más desagradable para mí, porque tenía que limpiar todo donde lo preparé, levantar la cáscara de la sabila, de los limones y lavar la coladera, el vaso donde tomé el jugo, y el vaso de la licuadora. Todo eso me desanimó a seguir adelante con mi rutina de tomar todos los dias el aloe de esta manera. Además de que viajaba constantemente y en ocasiones no era posible conseguirlo donde iba.

Fue cuando descubrí que había una manera más fácil de hacerlo y lo comparto con ustedes por si alguien lo quiere poner en práctica.

cortando la sábila
Cortando la sábila
Primeramente lo que hago es cortar la parte superior de una penca o bien si ya está cortada le corto la parte seca, (esa no la uso) después corto la parte que voy a usar como de 5 a 10 centímetros de largo, dependiendo del grosor de la penca que estoy cortando.

Quito espina a la sabila
Lo siguiente que hago es quitarle una franja de los costados, sobre todo para quitar las espinas que tiene la sábila, esto por dos motivos uno para quitar la espina y otro para poderle quitar propiamente la cáscara de la sábila.

descascarando la sábila.

Con algunas plantas se puede quitar perfectamente la cáscara, pero hay algunas plantas que se rompe y hay que quitarlos en pedazos mas pequeños, pero la intención es quitar la cáscara de la sabila de la parte de adentro tal como muestro en la foto y solo en una parte de la cáscara queda la pulpa.

comiendo la sábila
Comiendo la pulpa de la sábila
Con la pulpa recargada por un solo lado, lo que hago es ir mordiendo directamente el gel o la pulpa.

En un principio fue dificil, tengo que reconocerlo, porque la planta es amarga y visualmente no es agradable porque tiene una consistencia babosa.

Pero poco a poco me fui acostumbrando y ahora ya me acostumbré y hasta siento que es dulce.

En esta entrada solo comparto mi experiencia al consumirlo directamente, sin hacer mención de que sirve para quemaduras, para limpiar la piel, para el cabello entre otros usos.

Esperando que con esta entrada se animen a ponerlo en practica tambien ustedes y ojalá puedan compartir su propia experiencia.





No hay comentarios.:

Publicar un comentario